jueves, 17 de diciembre de 2009

Andando

Andando lento, apurándome rápido con un empujón, tropezando. Agarrándote con fuerza en un espejismo en la niebla, me encuentro con la locura y la temo, porque me lleva como el viento que me balancea a su antojo...a mi, tan pequeña. Encogiéndome de frío entre las sábanas, me pierdo y cierro los ojos para caer en la espesa oscuridad que me envuelve. Momentos en los que miles de susurros me suben por la nuca hasta inyectarse en mi mente, y luego recorren mi cuerpo vacío...tan vacío que duele. La piel cede al calor del agua, resbalando, surcando... La nada nada en mi todo...como meter los dedos en el enchufe, como meter la cabeza bajo el agua. Gritas afuera para escucharte más adentro, y yo sin embargo me escucho demasiado alto. Parece que ya no tiene importancia el peso si corres más deprisa ,pero siempre hay un momento en el que te paras de cansancio y entonces como una bola de acero que oyes llegar desde tu espalda te rompe los huesos cuando te encuentra..porque por mucho que corras, siempre te alcanza. Es como un reloj de péndulo que cuelga desde las cuerdas vocales y bate desde dentro contra un lado y otro...aveces te es dificil respirar, otras veces choca contra la espalda, otras rompe alguna vena y la hace sangrar. El hueco de mi fuero interno llora aveces y sin embargo sólo es fácil darse cuenta si mis ojos te lo cuentan.

1 sonrisas:

A. dijo...
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